Puede que hayas oído hablar de las cremas con liposomas pero quizás no tengas muy claro que es eso de los liposomas y para qué sirven en cosmética. Y es que escoger una buena crema no es tan fácil como puede parecer. Hay que fijarse bien en los ingredientes, principios activos y formulaciones para escoger el mejor producto para tu piel. A su vez, si tienes alergias o problemas cutáneos debes leer con atención el prospecto de la crema que te apliques para evitar problemas. Una vez está esto claro es importante utilizar productos de calidad.
Para que los principios activos de un cosmético actúen en profundidad deben atravesar las primeras capas de la piel, solo así se consigue un aspecto y una salud óptima. La cosmética actual utiliza el sistema de encapsulamiento por liposomas, una auténtica revolución para que los ingredientes penetren en las primeras capas de la piel.
Qué son y para qué se utilizan los liposomas en cosmética?
Un liposoma es una especie de vesícula o burbuja. Posee una membrana de doble capa formada por fosfolípidos. Se trata de moléculas grasas pequeñas pero esenciales en la estructura y función celular. Los fosfolípidos poseen propiedades hidrofílicas y lipofílicas. Para que lo entiendas, la membrana encargada de transportar las moléculas. Por eso, los liposomas suponen uno de los descubrimientos más importantes de los últimas décadas.
La función de los liposomas es la de captar, encapsular y transportar los diferentes principios activos para llegar a la capa de la piel donde puedan ejercer su función.
Es decir, que una crema con liposomas actuará más en profundidad.